miércoles, 24 de abril de 2013

Capítulo VII de la novela de 1º BTO

¿Conseguiremos acabar la novela? Vamos bastante lanzados.

CAPÍTULO VII

   Yakoov  se acordó entonces de que un colega suyo del pentágono le había comentado hacía tiempo que estaban construyendo un helicóptero supersónico de gran capacidad de destrucción. Conseguía no ser detectado por los radares israelíes, ¿pero qué pintaban los americanos?, ¿no eran nuestros amigos?, ¿cómo se atrevían a atacarnos?
   Yakoov dudaba de todo lo que estaba sucediendo, no podía ser verdad, ¿y si era una trampa?, ¿pero de quién?, ¿quién estaría interesado en que Israel atacara a Estados Unidos? Tantas eran las preguntas que Yakoov decidió hablar con su amigo Greg que trabajaba en el espionaje americano, y que controlaba más o menos lo que se tramaba en todas las organizaciones.
   Greg estaba en su despacho, precisamente en una reunión de emergencia por el artefacto desconocido que había caído en el Sahara…
   Había gran variedad de opiniones, que si un satélite, que si un meteorito, que si se habían atrevido a lanzar un misil, todo especulaciones, pero nada claro. Pues se planteaban más y más opiniones a los efectos del artefacto, porque el impacto en el Sahara había tenido más consecuencias, las comunicaciones se habían cortado, no funcionaban los teléfonos, no había luz, todo era un verdadero caos, todas las ciudades estuvieron así aproximadamente una hora. Cuando se reestablecieron las comunicaciones se enteraron de que eso mismo había pasado en otros países. No sabían qué pensar, ni qué hacer. Estaban totalmente desconcertados. ¿Realmente sería por el impacto de lo que había caído en el Sahara? En ese momento apareció Stephanie, secretaria de Greg, y le avisó de una llamada que tenía de su amigo israelí.
   Yakoov le cuenta lo de aquel helicóptero, que les había disparado, lo de aquellos hombres que aparecieron muertos y no había señal de sus respectivos países…Greg no daba crédito a lo que estaba escuchando.
   Cuando Yakoov terminó de contarle todo, Greg le confirmó que ellos no habían sido, que su helicóptero aún estaba en construcción, ¿y por qué?, ¿para qué?, ¿quién podría estar interesado en que rompamos nuestras relaciones?
   Los dos pensaron lo mismo…Rusia.

miércoles, 10 de abril de 2013

Capítulo VI de la novela de 1º de BTO


A ver si le ponemos título. Os dejo el capítulo VI. No todo era lo que parecía. Se pone interesante.

Capítulo VI



Julián decide volver al campamento del poblado nómada para recoger sus cosas y Alfred quiere acompañarle para examinar el extraño meteorito satélite.

Cuando llegan, ven la zona acordonada por las autoridades, .l Los cadáveres están siendo recogidos todavía y un jeep carga los heridos para dirigirse lo más deprisa posible hacia el hospital más cercano.

Se oyen mujeres y niños llorando, Julián y Alfred aprovechan el caos para saltarse el perímetro y ascienden hasta la duna en la que esta el meteorito. Alfred saca un kit de análisis de rocas, golpea con un pequeño partillo la roca, con cuidado de no dañar el satélite o lo que fuera esa máquina. Introduce los fragmentos en un escáner de alta tecnología y espera unos minutos. Momentos después se imprime por un lateral del aparato un gráfico ilegible para Julián.

-- Si esto no se equivoca, se trata de una roca real, proveniente del espacio—dijo Alfred. No me preguntes por que razón lleva incrustado este artefacto, pero es como si hubiera crecido en torno a él como una hiedra.

-- Es extraño.

La conversación fue interrumpida en ese momento por un hombre vestido de uniforme que se acercaba a ellos corriendo y gritando. Hablaba un idioma desconocido para ellos pero estaba claro que quería que se marcharan de ahí.

 

 

MIENTRAS TANTO EN EL CENTRO DEL ALTO MANDO ISRAELÍ…

-- Oye y ¿estáis seguros de que es nuestro satélite? – dijo Haussen. No me explico cómo puede saber un enemigo, cuya identidad afirmáis que son los iraníes, del satélite. Por favor, Yakoov comprueba las imágenes del satélite.

-- No entiendo este racionamiento tuyo—dice Yakoov mientras teclea ciertos códigos en el ordenador.

Su cara fue de gran asombro.

-- Parece que nuestro satélite simplemente se ha desviado un poco de su trayectoria y está un poco dañado, ya que las imágenes aparecen bastante más borrosas de lo normal. Supongo que el extraño objeto que ha caído habrá rozado el satélite y hemos confundido su trayectoria.

-- Bien, me lo imaginaba. Por favor, muéstrame las imágenes del ataque del helicóptero.

Yakoov obedeció y con un nuevo y rápido movimiento de dedos hizo que aparecieran en la pantalla, el fondo verde que caracterizaba las imágenes térmicas y un puñado de puntos blancos y rojos. De repente, se ve una sombra que pasa por encima disparando señales rojas.

-- Gracias, pero ahora auméntame la imagen del helicóptero y síguela.

Yakoov volvió a seguir las indicaciones de su compañero. Precipitadamente, Haussen pulsó un botón y la pantalla queda congelada. Sobre un ala del avión se distinguía claramente una bandera.

-- No se qué será ese trasto. Pero te aseguro que es algo importante, de otro modo, no estarían metidos los Estados Unidos.

jueves, 31 de enero de 2013

Encuentro con Pedro Zuazua

Este jueves 31 de enero hemos tenido un encuentro con Pedro Zuazua, director de comunicación del diario "El País". Ha resultado bastante interesante, pues durante una hora asistimos al periodismo en directo. Hubo muchas llamadas de teléfono sobre todo al final de la tertulia ante la noticia exclusiva que el periódico había publicado hoy.
Ha animado a lso alumnos a trabajar mucho, a leer, a viajar, a aprender idiomas. También a sacar una titulación universitaria con la que poder especialiarse dentro del periodismo.
Las preguntas fueron muy variadas, desde la situación de la prensa escrita y la futura evolución hasta los temas de mayor actualidad como la foto de Hugo Chaves.

sábado, 19 de enero de 2013

Capítulo V de la novela de 1º BTO


Yakoov no sabe nada de lo que está ocurriendo, y ante semejante situación, sufre un bloqueo mental en el que se da cuenta que el helicóptero que está terminando con sus hombres es muy potente y ante él no se puede hacer nada.
Su cabeza no paraba de pensar en lo que veía, aquellos círculos verdes  pasaban a ser rojos en cuanto alguien de sus hombres moría, con el acompañamiento de dos pitidos para confirmar su desaparición de la pantalla y del mundo.

Yakoov pasó a un estado muchísimo más agitado y de desesperación.

Lo único que Yakoov quería, era saber lo que estaba ocurriendo en esos instantes y quién demonios serian aquellos que derrocaban continuamente a sus hombres con disparos desde un potente helicóptero.

A Yakoov se le acababan las ideas . Cada vez el mundo se le venía más encima.

Yakoov se dijo a él mismo:

                    Tengo que acabar con esto inmediatamente, el problema es cómo

Yakoov pensó durante largas horas hasta que le se le vino la idea  de contactar con su gran amigo Haussen, con el  que compartió vivienda durante los años aneriores.

Haussen era especulador y se le daba muy bien examinar, registrar y sacar  partida a cosas tan difíciles.

Yakoov no dudó ni un instante, cogió la agenda y marcó el número:

                    Buenas ¿Quién es usted? - Dijo Hussen al otro lado del teléfono...
                    !Haussen! Menos mal amigo, soy Yakoov. Mira, necesito quedar contigo ahora mismo.

Yakoov  le contó todo lo que estaba ocurriendo con la desaparición de sus hombres por medio de un helicóptero del que Yakoov dudaba que podía ser un helicóptero procedente de Irán para llevarse el meteorito.

Tras escuchar a Yakoov, Hauseen decidió hablar más detenidamente con Yakoov por lo que quedaron en la sala de vigilancia, en la que se podía ver el caso de  la desaparición de los israelies.
Tras varias horas delante de la pantalla, viendo la desaparición de los hombres de Yakoov, Haussen tiene varias ideas en mente que va a ir descartando poco a poco para llegar a una conclusión final.

domingo, 6 de enero de 2013

Capítulo IV de la novela de 1º de BTO

CENTRO DEL ALTO MANDO ISRAELÍ 3.00 DE LA MADRUGADA
El teniente Yaakov suspiró y volvió a beber un sorbo de un café que ya se había quedado frío.
Contempló la pantalla de reflejos verdosos como había estado haciendo durante las últimas tres horas. Jamás hubiera imaginado que, despues de los durísimos entrenamientos y pruebas que había tenido que superar para conseguir formar parte de uno de los mejores servicios de inteligencia del mundo, ahora le ordenasen pasar horas y horas delante de un ordenador.
 
Hacía solo cinco minutos que Yaakov había hablado con el comando especial de las fuerzas israelíes enviado al Sahara para recuperar el objetivo y según esta última comunicación, la misión transcurría tal y como estaba prevista. La labor del teniente Yakoov era contactar con los aviones espía y hacer un seguimiento desde el aire utilizando para ello la nueva teconología con cámaras térmicas que poseía el ejército hebreo.

De repente, el teniente vio con sorpresa cómo una nueva señal aparecía en la pantalla. Un helicóptero de combate había aparecido por sorpresa detrás de las dunas. No era de los suyos. Alarmado, Yakoov observó que el helicóptero comenzaba a disparar y las señales térmicas de los soldados israelies comenzaron a debilitarse en la pantalla.

Yaakov cogió el teléfono para dar la señal de alarma en el Alto Mando Operativo mientras miraba como los soldados del comando estaban siendo eliminados por un misterioso helicóptero surgido de la nada en mitad del desierto.
Se preguntó si quizás los iraníes no iban a dejar de intentar de apoderarse del objetivo y averiguar de esa forma si la información que contenía podía ser peligrosa para ellos.

sábado, 22 de diciembre de 2012

Capítulo III de la novela de 1º Bto

Os dejo el capítulo III de la novela de 1º Bto. Es de Abraham.

CAPÍTULO 3

 
Julián se encontró con Alfred a los pies del faro de Melilla, el cielo estaba nublado y la escasez de luz junto con el olor a salitre y la imponente figura del faro creaban una  extraña atmósfera.

-          ¿Por qué me has citado aquí? - Dijo Alfred-  ¿No se suponía que me ibas a llevar a ver ese meteorito?

-          Si te he convocado en un sitio tan solitario es por un buen motivo: hay algo extraño en todo esto. Es cierto que parece un meteorito, pero cuando me acerqué después de que la tribu de bereberes acabase de rezar a su dios, descubrí signos que delataban que no lo es. Tiene ciertas antenas, y si te acercas puedes ver paneles solares camuflados con pintura especial y botones extraños.

-          ¿Qué me quieres decir con esto?

-          No sé exactamente lo que es, aunque está claro que vino del espacio. Pero ayer sucedió algo más extraño aun. Vino un convoy militar, del que se bajaron una decena de soldados sin ninguna distinción de nación. Con ellos venía un hombre trajeado y un representante del gobierno de Argelia. Tuvimos una conversación privada, me dijeron que no me preocupase, que se llevaban el meteorito al laboratorio para analizarlo. Me sorprendió que dijese que eran de Argelia por que el hombre trajeado y los soldados tenía el aspecto característico de los israelíes. Justo cuando procedían a llevárselo un helicóptero Cobra pasó a poca altura disparando sus ametralladoras. Yo salí corriendo y me colgué desde el interior del pozo de la tribu. Cuando salí todo era un desastre. Un montón de muertos tanto de la tribu como de los extranjeros. Cogí uno de los jeeps de los soldados y me dirigí directamente aquí.

-          ¿Quiénes eran los atacantes del helicóptero?

-          Todo lo que te he contado es lo que sé.

 

 

 

miércoles, 12 de diciembre de 2012

Capítulo II de la novela de 1º BTO

           Os dejo la segunda entrega, a nombre de Jesús G. de 1º de bachillerato.

Capítulo 2
 

Dentro del servicio secreto israelí, hubo una conversación muy agitada entre el director de campo y el jefe de operaciones en el extranjero:
 
-          ¿Me estás diciendo que habéis perdido la pista al objetivo? –preguntó el primero.

-          No, no es eso exactamente. Nuestros chicos saben más o menos dónde está, pero no saben la posición exacta. Tenemos un territorio reducido dentro del desierto del Sahara y creemos que la posición más probable en donde haya caído está cerca de una tribu nómada.

-          ¿No tenemos nada más?

-          En realidad, también tenemos dos nombres, Alfred y Julián, a partir de ellos sacamos la posición. Por lo visto son amigos, Alfred es un geólogo español bastante famoso, mientras que el otro es un simple reportero, también de España que está estudiando a la tribu que le he dicho –el jefe de operaciones hizo una pausa y después continuó-. Aproximadamente a primera hora de la mañana, se estrelló el objetivo e interceptamos una llamada entre ellos dos. Alfred y Julián van a verse pronto, sabemos el lugar exacto y también sabemos cuándo van a encontrarse. Por eso le he avisado de inmediato. ¿Qué hacemos?

 
El director tenía un asunto muy delicado entre manos, si intervenía, tendría que dar explicaciones ante la ONU y no quería tener más problemas de los que pudiera solucionar, por otra parte, si no intervenía, tendría a un reportero y a un geólogo investigando y todo lo que había conseguido en la guerra se iría al garete.
 

-          Envía a tu mejor Katsa y que no haga nada, solamente que los mantenga a raya. Que vayan también a unos cuantos hombres para retirar discretamente el material, pero que no sufra ningún daño. Es bastante delicado y necesitamos toda la información posible. Si necesitas más soldados, dímelo, haremos lo necesario.
-          Señor, puede que esto no me concierna pero ¿Tantos medios por un solo meteorito?
-          No es un meteorito, es un satélite espía con información secreta sobre las bases de los misiles secretos iraníes. Si averiguan que les estamos espiando, otra vez se iniciará la guerra.